Una manera deliciosa de cocinar pescado es confitarlo. Queda especialmente jugoso, y mantiene todo el sabor y la textura. Os pongo primero una breve definición de qué es confitar:
“Cocer un género sumergiéndolo en grasa caliente (55-70ºC) y preferiblemente tapado, para que se cocine sin que tome color, por ejemplo conejo, setas, aves, pescado o de pato”
Conseguir la temperatura adecuada de manera tradicional es algo complejo, necesitamos un termómetro de cocina y vigilar constantemente para subir o bajar el calor. En mi olla programable, simplemente es darle a un botón, programar el tiempo y listo!.
Hoy os traigo estas ricas sardinas, que bien cubiertas con el mismo aceite en la que las hemos confitado aguantan una semana sin estropearse en la nevera. Las podéis consumir tal cual, o utilizarlas para añadir a una ensalada, una coca... como os digo siempre, usad vuestra imaginación!
Sardinas confitadas - Olla GM F y G
Ingredientes:
1 kilo de sardinas (sin cabeza, tripas ni escamas)
1 limón en rodajas
10/15 granos de pimienta negra
5 dientes de ajo pelados y laminados
Aceite suficiente para cubrir las sardinas
2 hojas de laurel
Sal
Elaboración:
Salamos por dentro las sardinas y las colocamos en la cubeta, junto con el limón en rodajas, la pimienta, los ajos y el laurel.
Cubrimos completamente con aceite (importante este punto, nada de poner dos dedos de aceite en la cubeta, el pescado debe quedar completamente cubierto).
Cerramos tapa y con la válvula abierta programamos menú confitar 50 minutos (la temperatura de este menu es de 55º, medido con termómetro).
Cuando haya pasado el tiempo, sacamos las sardinas de la cubeta y las pasamos al recipiente donde las vayamos a conservar en la nevera. Las cubrimos con aceite del confitado y añadimos los ajos laminados y las rodajas del limón.
Las dejamos reposar un día, y listas para consumir.
Una observación: no esperéis que estas sardinas queden como las que compramos en conserva. Es una preparación completamente diferente,.
Aunque tienen poca "chicha", los cangrejos de río son un excelente aperitivo, e incluso en un arroz aportan un sabor intenso y muy rico.
En casa tengo dos devoradores de cangrejos, y siempre que los encuentro en el supermercado (ya cocidos, si están vivos ahí se quedan.... ) me traigo un kilo para darles el capricho.
Yo reconozco que lo que más me gusta es la salsita, pero ellos se entretienen un montón y lo disfrutan. Así que hoy comparto con vosotros la receta y espero que si la hacéis me dejéis un comentario!
Cangrejos de río en salsa
Ingredientes:
1 kilo de cangrejos de río cocidos
150 gramos de jamón serrano en taquitos
150 gramos de chorizo (picante o dulce) en taquitos
2 cayenas (opcional)
1 y 1/2 cucharadita de pimentón (picante o dulce)
2 hojas de laurel
2 cebollas troceadas
2 dientes de ajo
1 cucharada de harina
120 ml de vino blanco
Aceite
Sal
Agua
Elaboración:
Ponemos un fondo de aceite en la cubeta y programamos menú plancha (modelos D y E) menú sofreír 140º (modelos F y G). Cuando el aceite esté caliente añadimos la cebolla picada finamente y los dientes de ajo laminados. Dejamos pochar hasta que la cebolla esté transparente sin que lleguen a quemarse los ajos.
Incorporamos las cayenas, el chorizo y el jamón, damos unas vueltas con la lengua de silicona y añadimos la harina, removiendo para que se tueste un poco. Ponemos el pimentón, damos unas vueltas e inmediatamente agregamos el vino blanco y dejamos que dé un hervor para evaporar el alcohol.
Ponemos los cangrejos en la cubeta y cubrimos con agua, añadiendo el laurel y la sal.
Cancelamos menú, cerramos tapa y válvula y programamos menú cocina (modelo D) menú guiso 140º presión media (modelos E, F y G) 10 minutos.
Dejamos que despresurice sola y abrimos.
Si queremos que espese la salsa, programamos menú horno sin tapa hasta que reduzca a nuestro gusto.