Tarta clásica de nata y fresas
El domingo hemos celebrado el quinto cumpleaños del mayor de nuestros tres nietos, Iván. Y no podía faltar una tarta de la abuela, claro!Me decidí por la clásica de nata y fresas porque gusta a todos, no tiene ninguna complicación a la hora de realizarla y tiene muy buena presencia.
Tarta de nata y fresas
Ingredientes:
Haremos un bizcocho clásico de yogur, porque en este caso no quería una tarta muy grande. Podéis hacer cualquier bizcocho clásico que queráis:
1 yogur de fresa
1 medida del yogur de aceite
2 medidas del yogur de azúcar
3 medidas de yogur de harina
3 huevos
1 sobre de impulsor quimico tipo Royal
Para el almíbar:
200 ml de agua
200 gramos de azúcar
Para el relleno y cobertura:
500 ml de nata montada
500 gramos de fresas naturales
Elaboración:
Batimos los huevos con el azúcar hasta que blanqueen. Añadimos el yogur y el aceite y batimos otra vez. Cuando esté bien batido, incorporamos el azúcar, la harina y el impulsor químico mezclándolos cuidadosamente con espátula. Si estamos usando Cecomixer, la mezcla de líquidos la haremos con las varillas a V8 y al incorporar los sólidos cambiamos a la paleta metálica y mezclamos en V3.
En Cecomix Plus / Mambo, mezclamos primero los huevos y el azúcar en V7 3 minutos, añadimos huevos y aceite y mezclamos de nuevo V4 2 minutos y finalmente incorporamos los sólidos, 2 minutos V4.
Engrasamos el fondo y las paredes de una cubeta antiadherente (preferiblemente excellence) y vertemos la mezcla.
Programamos menú horno (modelo D) menú horno 130º (modelos E y F) 35 minutos y cerramos tapa, válvula abierta. Cuando termine el tiempo pinchamos el centro con un palillo y si sale seco dejamos 10 minutos más en mantenimiento de calor. Si aún sale algo mojado, programamos unos minutos más.
No es necesario utilizar el cabezal de horno, puesto que la parte blanca la pondremos contra el plato de servir.
Una vez desmoldado el bizcocho lo dejamos enfriar. Mientras tanto ponemos el agua y el azúcar en la cubeta y programamos menú horno en todos los modelos, sin tapa. Removemos hasta conseguir un almíbar que empiece a espesar.
Cuando el bizcocho esté frío lo partimos por la mitad y empapamos la parte de abajo con almíbar. No es necesario ponerlo todo, iréis viendo vosotros lo que nos va pidiendo para que no quede seco pero sin llegar a que se deshaga.
Rellenamos con la nata montada y fresas troceadas, ponemos la otra mitad y decoramos con el resto de la nata y más fresas.